Versículo diario comentado: Éxodo 3:5-6

Publicado por

Versículo:

Y dijo: No te acerques; quita tu calzado de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa es. Y dijo: Yo soy el Dios de tu padre, Dios de Abraham, Dios de Isaac, y Dios de Jacob. Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios. Éxodo 3:5-6

Comentario:

Piense en alguna ocasión en la que usted estuvo muy distraído; es poco probable que pudiera escuchar a Dios. A veces, cuando eso sucede, el Señor elige hablar por medio de circunstancias poco comunes.

Piense en Moisés en el capítulo 3 de Éxodo. Aunque había recibido una buena educación y sido criado por la realeza, fue desterrado al desierto. Sin duda, estuvo sorprendido por tales acontecimientos y preocupado con miedo, frustración y orgullo.

Pero Dios tenía grandes planes para Moisés. Así que le preparó algo que no podía ignorar: una zarza ardiente. Y aun más sorprendente, ¡el Señor habló a Moisés por medio de ella!

La Biblia nos da más ejemplos, como la asna de Balaam, a la que dio la capacidad de hablar (Nm 22.28). A veces, así es justo cómo actúa Dios: haciendo algo tan inusual que no tenemos más remedio que detenernos, mirar y escuchar.

Es útil reconocer a Dios en cada circunstancia, desde lo insólito e inesperado hasta lo más simple y ordinario. Al pasar tiempo en su Palabra y en oración, podemos llegar a percibirlo cada vez mejor. Y luego, ya sea que nuestra situación parezca increíblemente buena o insoportablemente mala, haremos bien en retroceder y pedirle al Señor que nos ayude a ver el asunto desde su perspectiva.

Oración:

Señor, ayúdame a estar atento a tu voz en cada circunstancia de mi vida, ya sea en lo extraordinario o en lo cotidiano. Abre mis ojos para reconocer tu obra y mis oídos para escuchar tu dirección. Enséñame a confiar en tus planes, incluso cuando no los entiendo, y a buscar tu guía con un corazón dispuesto a obedecer. Que tu presencia me llene de paz y sabiduría, guiándome en cada paso que doy. En el nombre de Jesús, Amén.