Guerrero de Dios: Una posición de liderazgo

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Entonces Jehová dijo a Josué: Desde este día comenzaré a engrandecerte delante de los ojos de todo Israel, para que entiendan que como estuve con Moisés, así estaré contigo. Josué 3:7

¿Qué dirías si el Señor te pidiera asumir un papel de liderazgo, como lo hizo con Josué?
Dios desea que respondamos con valor y fe cuando nos llama a enfrentar tareas que parecen más grandes que nosotros. Pero ¿cómo podemos hacerlo? Aquí hay cuatro pasos que nos ayudarán a confiar en Él con valentía:

  1. Medita en la Palabra de Dios.
    Debemos buscar el significado de las Escrituras como si estuviéramos buscando un tesoro. Con la ayuda del Espíritu Santo, entenderemos la Palabra y aprenderemos a aplicarla a nuestras circunstancias.
  2. Obedece la Palabra.
    La Escritura debe moldear nuestro pensamiento y nuestro comportamiento. Al meditar en las verdades bíblicas, éstas se imprimen en nuestra mente y comienzan a influir en nuestras acciones.
    “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.” (Salmos 119:11)
  3. Confía en las promesas de Dios.
    Josué condujo a los israelitas a cruzar el río Jordán rumbo a la tierra prometida porque creyó en la Palabra del Señor. Él tomó a Dios en serio y actuó conforme a Su promesa.
  4. Recuerda las victorias pasadas.
    Recordar la protección y fidelidad de Dios en el pasado fortalece nuestra confianza para el futuro. Cada vez que Él nos ha sostenido, nos deja un testimonio para mantener viva nuestra fe.

Poner en práctica estos pasos nos ayudará a enfocarnos en la victoria en lugar de la derrota, a dejar de lado los temores innecesarios y a obedecer a Dios con valentía.

Reflexión:

¿Hay un área en tu vida donde el Señor te llama a confiar en Él y ser valiente? Recuerda: el mismo Dios que abrió el Jordán para Josué también abrirá camino para ti cuando des el paso de fe.

Señor, enséñame a meditar en Tu Palabra, a obedecerla y a recordar Tu fidelidad. Aumenta mi fe para confiar en Tus promesas y actuar con valentía, sabiendo que Tú nunca fallas. En El Nombre de Jesús, Amén.