ENTREGA
«La vida cristiana no es un esfuerzo humano por agradar a Dios, sino una rendición total para que Cristo viva en nosotros.»
Reflexión:
Hoy, deja de luchar por controlar todo. El llamado de Dios no es a hacer más, sino a entregarte más.
No se trata de lo que logras, sino de cuánto permites que Cristo obre en ti.
En la entrega hay descanso, y en el descanso hay poder.