-
Apocalipsis 17 – La Mujer sobre la Bestia y el Juicio de Babilonia
Apocalipsis 17 presenta un juicio divino sobre Babilonia, representando el sistema mundial corrupto que se opone a Dios.
- La mujer simboliza la corrupción espiritual de aquellos que han rechazado a Dios y se han entregado a la idolatría y la inmoralidad.
- La bestia es el imperio del mal que apoya a la mujer, pero finalmente será destruida por Dios.
- La escena refleja la completa derrota de todo lo que se opone a Cristo, mostrando que, a pesar de los aparente poder de la maldad, la victoria final pertenece a Cristo.
Este capítulo nos advierte sobre los peligros del pecado y la corrupción espiritual, y nos llama a mantenernos fieles a Dios, sabiendo que el juicio de Dios es justo y seguro. La caída de Babilonia es una señal de la victoria final de Dios sobre el mal y de la restauración de su reino.
- La Mujer sobre la Bestia (Apocalipsis 17:1-6)
Uno de los siete ángeles que tiene las siete copas se acerca a Juan y le muestra el juicio de la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas (v.1).
- La mujer está vestida de púrpura y escarlata, y tiene sobre su frente un nombre escrito: “Misterio: Babilonia la Grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra” (v.5).
- La mujer representa a Babilonia, la ciudad de la idolatría, la corrupción y el pecado.
- La mujer está montada sobre una bestia escarlata, que tiene siete cabezas y diez cuernos, y la bestia es la fuerza maligna que la apoya (v.3).
- La mujer está embriagada con la sangre de los santos y de los mártires de Jesús (v.6), lo que indica que la ciudad de Babilonia ha perseguido a los fieles de Dios.
2. La Explicación del Misterio (Apocalipsis 17:7-18)
El ángel le explica a Juan que el misterio de la mujer y la bestia tiene un significado profundo.
- La bestia que lleva a la mujer es la representación del imperio del mal, que tiene una historia compleja (v.7-8).
- Las siete cabezas de la bestia representan siete montes sobre los que se asienta la mujer, lo que hace referencia a la ciudad de Roma (que se conoce como la ciudad de los siete montes).
- Las diez coronas en la bestia representan diez reyes que aún no han recibido el poder (v.12), pero que dan su poder a la bestia en el futuro.
- Estos diez reyes unirán sus fuerzas con la bestia y harán guerra contra el Cordero, pero el Cordero vencerá porque es el Señor de los señores y Rey de los reyes (v.14).
- La mujer y la bestia representan el sistema corrupto del mundo, que es guiado por Satanás y que se opone a Cristo.
- El ángel también explica que las aguas sobre las que está la mujer representan a las naciones y pueblos que la prostitución espiritual de Babilonia ha influenciado (v.15).
- Finalmente, el ángel le revela que la bestia será destruida, y la mujer que representa a Babilonia será devorada por los diez reyes (v.16-17).
3. El Juicio de Babilonia (Apocalipsis 17:16-18)
- Los diez reyes que están unidos a la bestia odiarán a la mujer (Babilonia) y la despojarán. La bestia, que ha sido la instrumento del pecado y la corrupción, ahora se vuelve en contra de Babilonia.
- Babilonia será destruida por las fuerzas del mal, lo que muestra que la corrupción y el pecado no prevalecerán.
- El ángel explica que el dominio de Babilonia es temporal, y que Dios ha determinado su destrucción.
- El final de Babilonia representa el juicio de Dios sobre toda forma de idolatría, corrupción y maldad, y la victoria final de Cristo sobre las fuerzas del mal.
Versículo clave:
Y la mujer que viste es aquella gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra. Apocalipsis 17:18
Este versículo hace referencia a una gran ciudad, representada en la visión de Juan por una mujer vestida con ropas espléndidas, que simboliza la babilonia espiritual, un sistema de corrupción y rebelión contra Dios que influye poderosamente en los reyes de la tierra. La mujer es descrita como la madre de las abominaciones, y su influencia se extiende sobre todo el mundo, controlando tanto el poder político como el económico, en oposición a los valores y principios de Dios.
Este pasaje nos recuerda que el mal tiene una presencia poderosa en la historia, manipulando los corazones y mentes de aquellos que siguen sus caminos. Sin embargo, el versículo también anticipa el juicio de Dios sobre este sistema corrupto, mostrando que aunque el mal parezca dominante, su fin está asegurado bajo la soberanía divina.
Oración:
Señor, ayúdame a mantener mi mirada fija en Ti y no en las influencias del mundo que se oponen a Tu verdad. Protege mi corazón de ser seducido por las promesas falsas y enséñame a vivir con integridad y fidelidad a Tu palabra. Que mi vida sea un testimonio de Tu justicia y verdad. En el nombre de Jesús, Amén.
