2 Corintios 6
2 Corintios 6 nos llama a vivir con urgencia la fe, sin desperdiciar la gracia de Dios. Nos desafía a perseverar en la fidelidad a Cristo, incluso en medio de pruebas. También nos exhorta a mantenernos apartados de influencias que comprometan nuestra relación con Dios, recordándonos que somos su pueblo y Él es nuestro Padre.
Llamado a No Recibir la Gracia de Dios en Vano (2 Corintios 6:1-2)
Pablo exhorta a los creyentes a no recibir la gracia de Dios en vano, sino a responder con obediencia y compromiso. Recuerda que hoy es el día de salvación, enfatizando la urgencia de vivir conforme al evangelio.
Las Pruebas del Ministerio de Pablo (2 Corintios 6:3-10)
Pablo describe cómo ha procurado no ser tropiezo para nadie, viviendo con integridad para que su ministerio no sea desacreditado. Enumera las dificultades que ha enfrentado, incluyendo tribulaciones, necesidades, azotes, cárceles, trabajos y ayunos, pero también destaca su perseverancia en pureza, conocimiento, paciencia y amor sincero.
Aunque es considerado como moribundo, castigado, pobre y sin posesiones, en realidad está vivo, gozoso y enriqueciendo a muchos con el evangelio.
No Unirse en Yugo Desigual (2 Corintios 6:11-18)
Pablo advierte a los creyentes no unirse en yugo desigual con los incrédulos, ya que no hay comunión entre la luz y las tinieblas ni entre Cristo y Belial.
Dios nos ha llamado a ser su pueblo santo, apartados para Él. Si nos apartamos de la impureza, Dios nos recibirá y seremos sus hijos e hijas.
Versículo clave de 2 Corintios 6:
No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? 2 Corintios 6:14
Este versículo es una advertencia sobre la importancia de las relaciones y alianzas que formamos como creyentes. Pablo insta a los cristianos a no unirse en yugo desigual con los incrédulos, ya que una relación estrecha con quienes no comparten la fe puede afectar nuestra comunión con Dios. Esto aplica a relaciones personales, sociedades y cualquier vínculo que pueda comprometer nuestra vida espiritual.
Este pasaje no significa que debamos aislarnos del mundo, sino que debemos ser sabios en nuestras conexiones más íntimas. Nos llama a rodearnos de personas que nos fortalezcan en la fe y a ser luz en medio de la oscuridad sin comprometer nuestros valores cristianos.
Oración:
Señor, dame sabiduría para elegir bien mis relaciones y alianzas. Ayúdame a mantenerme firme en mi fe y a rodearme de personas que me acerquen más a Ti. Que mi vida refleje tu luz en todo lugar, y que pueda influenciar a otros sin comprometer mi relación contigo. En el nombre de Jesús, Amén.