Biblia Devocional en 1 Año: 2 Corintios 13

Publicado por

2 Corintios 13

2 Corintios 13 nos llama a autoevaluarnos espiritualmente, asegurándonos de que nuestra fe es genuina. También nos recuerda que la autoridad espiritual debe usarse con amor y para edificación. Finalmente, nos exhorta a vivir en unidad, paz y madurez en Cristo, confiando en la gracia, el amor y la comunión que Dios nos da.

Advertencia en la Tercera Visita de Pablo (2 Corintios 13:1-4)

Pablo anuncia que esta será su tercera visita a Corinto y cita el principio bíblico de que todo asunto debe confirmarse con dos o tres testigos.

Advierte que no dudará en reprender a quienes continúan pecando, pues quiere que entiendan que Cristo está en medio de ellos con poder. Aunque Jesús fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios, y los creyentes también deben vivir en ese poder.

Exhortación a la Madurez Espiritual (2 Corintios 13:5-10)

Pablo insta a los corintios a examinarse a sí mismos para ver si realmente están en la fe. Les asegura que su deseo no es mostrar autoridad con dureza, sino edificarlos.

Ora para que hagan lo bueno, porque su interés no es su propia reputación, sino el bienestar espiritual de la iglesia. Aunque tiene autoridad apostólica, prefiere usarla para edificación y no para destrucción.

Saludos Finales y Bendición (2 Corintios 13:11-14)

Pablo concluye con una serie de exhortaciones:

  • Alegrarse en el Señor.
  • Vivir en unidad y paz.
  • Ser maduros espiritualmente.

Luego, les envía saludos y les deja una bendición trinitaria, mencionando la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo.

Versículo clave de 2 Corintios 13:

«Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?»  2 Corintios 13:5

En este versículo, Pablo exhorta a los creyentes a hacer una autoevaluación espiritual para asegurarse de que realmente están en la fe. No se trata solo de conocimiento o asistencia a la iglesia, sino de una relación auténtica con Cristo. La verdadera fe debe evidenciarse en nuestra vida diaria, en nuestra manera de pensar, hablar y actuar.

Este pasaje nos desafía a reflexionar sobre nuestra vida espiritual y a no dar por sentado nuestra relación con Dios. Nos anima a vivir en comunión con Cristo, permitiendo que su presencia en nosotros transforme nuestro carácter y nuestras acciones.

Oración:

Señor, ayúdame a examinar mi corazón y mi vida para asegurarme de que mi fe es genuina. Que mi relación contigo sea real y transformadora, reflejando tu amor y verdad en todo lo que hago. Fortaléceme en la fe y guíame en el camino de la obediencia y la santidad. En el nombre de Jesús, Amén.