Versículo:
Quitado este, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero. Hechos 13:22
Comentario:
El rey David cometió errores serios, pero aun así fue llamado un hombre conforme al corazón de Dios y usado poderosamente por el Señor. Lo que lo distinguió no fue su perfección, sino la prioridad que dio a su relación con el Padre. David se deleitaba en conocer a Dios y lo buscaba con pasión. Cuando escribió que su alma tenía sed del Señor, estaba declarando que el amor de Dios era mejor que la vida misma.
David veía la vida desde una perspectiva centrada en Dios. En sus escritos exaltó el poder creador del Señor, expresó su dependencia para recibir protección y fortaleza, y proclamó su lealtad absoluta. Oraba con fervor y constancia, presentando sus peticiones y esperando con confianza la respuesta de Dios (Salmo 5:3).
La oración y la adoración alimentaron la confianza de David en el Señor. Esa fe lo sostuvo en cada etapa de su vida: como pastor defendiendo ovejas, como joven enfrentando a Goliat y como rey gobernando al pueblo de Israel. Los salmos revelan su profundo deseo de conocer la voluntad de Dios y caminar bajo Su dirección.
De la misma manera, el apóstol Pablo nos exhorta a dar prioridad a conocer a Cristo, para que nuestra fe descanse en el poder de Dios y no en la sabiduría humana (1 Corintios 2:2-4). Que Jesús ocupe siempre el primer lugar en nuestra vida.
Oración:
Señor, dame un corazón conforme al tuyo. Ayúdame a buscarte con sinceridad y a darte el primer lugar en cada área de mi vida. Enséñame a orar, a adorarte y a confiar en ti en toda circunstancia. Que mi fe repose en tu poder y que mi mayor anhelo sea conocerte y agradarte cada día. En El Nombre de Jesús, Amén.