Versículo diario comentado: Éxodo 14:14 

Publicado por

Versículo:

Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos. Éxodo 14:14 

Comentario:

En la Biblia encontramos varios ejemplos en los que Dios pidió a Su pueblo que se quedara quieto para ver Su salvación. El primero aparece en Éxodo 14:13, cuando Moisés les dijo al pueblo: «No temáis; estad firmes y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros; porque los egipcios que hoy habéis visto, nunca más para siempre los veréis.» Las circunstancias eran tan difíciles que los hijos de Israel no tenían escapatoria; estaban acorralados entre el mar y el ejército egipcio. Pero Dios solo les pidió una cosa: permanecer quietos y confiar.

El segundo ejemplo se encuentra en 1 Samuel 12:16, cuando Samuel les dijo: «Ahora, pues, presentaos, y considerad las grandes cosas que Jehová hará delante de vuestros ojos.» En ese momento, el pueblo de Israel había insistido en tener un rey, como las demás naciones. Samuel les advirtió que eso no era lo mejor y pidió a Dios que enviara truenos y lluvia para que temieran al Señor. Aun así, Dios mostró Su misericordia, preparando el camino para que, a través de ese linaje, naciera Jesús, quien trajo salvación al mundo entero.

El tercer ejemplo aparece en 2 Crónicas 20:14-17, cuando el Espíritu de Dios vino sobre Jahaziel, quien dijo: «No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. […] Estad quietos, y ved la salvación de Jehová con vosotros.» Josafat y su pueblo enfrentaban enemigos poderosos, pero al orar y humillarse ante Dios, recibieron la instrucción divina de quedarse firmes y ver cómo el Señor peleaba por ellos.

Hoy, Dios sigue diciendo lo mismo: «Quédate quieto y deja que Yo pelee por ti.» Cuando Dios libra tus batallas, ¡la victoria está asegurada!

Oración:

Señor, ayúdame a confiar plenamente en Ti cuando las circunstancias me sobrepasan. Enséñame a quedarme quieto, sin temor ni ansiedad, sabiendo que Tú peleas por mí. Que mi corazón descanse en Tu poder y Tu fidelidad, y que mi fe se fortalezca al ver Tu mano obrando a mi favor. En el Nombre de Jesús, Amén.