CCDIOS

Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.

En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás. Socórreme y líbrame en tu justicia; Inclina tu oído y sálvame. Sé para mí una roca de refugio, adonde recurra yo continuamente. (Salmos 71:1-2)

Señor, ayúdame a mostrar la abundacia de mi corazón, con palabras que brinden alivio y sabiduría a aquellos que me rodean.

Que este día esté lleno de muchas cosas bonitas y positivas. Que la bendición de Dios no falte nunca.

Señor, hoy viviré con alegría, porque sé que Tú estás conmigo y desde ahora, en tu nombre declaro que hoy será un día de triunfo, donde mis anhelos se convertirán en dulce realidad y viviré rodeado de amor, felicidad, paz y prosperidad. Mi vida es maravillosa gracias a Ti Señor, alabado seas por siempre.

Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.

En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás. Socórreme y líbrame en tu justicia; Inclina tu oído y sálvame. Sé para mí una roca de refugio, adonde recurra yo continuamente. (Salmos 71:1-2)

Señor, ayúdame a convertirme en el conquistador de mis propias cargas y miedos llevado de la mano de ese amor inalterable con el que me cubres, sin condiciones, cada día de mi vida. 

No hay mejor manera de empezar el día que encomendándome en las manos de DIOS.