Biblia Devocional en 1 Año: Éxodo 3

Éxodo 3 – El llamado de Moisés en la zarza ardiente

Éxodo 3 es un capítulo central en la historia de la redención:

• Dios se revela como un Dios vivo, santo y cercano, que escucha el clamor de su pueblo.
  
• El nombre divino YO SOY nos recuerda su eternidad, fidelidad e inmutabilidad.
  
• Moisés aprende que no se trata de su capacidad, sino de la presencia y poder de Dios.
  
• El capítulo nos invita a confiar en que Dios nunca abandona a los suyos y cumple sus promesas con poder.

1. La zarza ardiente (Éxodo 3:1-6)

• Moisés pastoreaba las ovejas de Jetro, su suegro, en el desierto (v.1).
  
• Allí ve una zarza que ardía en fuego y no se consumía (v.2).
  
• Al acercarse, Dios lo llama desde la zarza: “¡Moisés, Moisés!”, y le ordena quitarse el calzado porque está en tierra santa (v.4-5).
  
• Dios se presenta como el Dios de Abraham, Isaac y Jacob, y Moisés cubre su rostro por temor (v.6).
  

2. La misión de liberar a Israel (Éxodo 3:7-12)

• Dios declara haber visto la aflicción de su pueblo en Egipto y oído su clamor (v.7).
  
• Le anuncia a Moisés que lo enviará a faraón para sacar a los hijos de Israel de Egipto (v.10).
  
• Moisés se siente incapaz y pregunta: “¿Quién soy yo para que vaya a faraón?” (v.11).
  
• Dios responde con la promesa: “Ve, porque yo estaré contigo” (v.12).
  

3. El nombre de Dios revelado (Éxodo 3:13-15)

• Moisés pregunta qué nombre debe dar a los israelitas cuando pregunten quién lo envió (v.13).
  
• Dios responde: “YO SOY EL QUE SOY” (Ehyeh-Asher-Ehyeh), y añade: “Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros” (v.14).
  
• También declara: “Jehová, el Dios de vuestros padres… este es mi nombre para siempre” (v.15).
  

4. Dios anuncia su plan de liberación (Éxodo 3:16-22)

• Moisés debía convocar a los ancianos de Israel y anunciar que Dios los sacaría de Egipto hacia una tierra buena y ancha, que fluye leche y miel (v.16-17).
  
• Dios advierte que faraón no los dejará ir fácilmente, pero Él mostrará su mano poderosa con maravillas (v.19-20).
  
• Al final, Israel saldrá con riquezas, pues los egipcios les darán plata, oro y vestidos (v.21-22).

Versículo clave de Éxodo 3:

Y respondió: Ve, porque yo estaré contigo; y esto te será por señal de que yo te he enviado: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, serviréis a Dios sobre este monte. Éxodo 3:12

En Éxodo 3, Moisés tiene un encuentro que cambia el rumbo de su vida: Dios se le aparece en la zarza ardiente y lo llama para liberar a Israel de la esclavitud en Egipto. Moisés, consciente de sus limitaciones, cuestiona su capacidad y se siente incapaz de semejante misión. Pero la respuesta de Dios no apunta a lo que Moisés puede hacer, sino a lo que Dios hará con él: “Yo estaré contigo.”

Este versículo nos enseña que la verdadera seguridad no está en nuestras habilidades, sino en la presencia de Dios que nos respalda. Moisés no necesitaba confiar en su fuerza, sino en el Dios que lo enviaba. La señal no sería algo inmediato, sino la confirmación futura de que, cuando Israel fuese liberado, volverían a ese monte para adorar a Dios.

Así también en nuestra vida, Dios nos llama a tareas que muchas veces parecen más grandes que nosotros mismos. Podemos sentir miedo, incapacidad o inseguridad, pero la promesa sigue siendo la misma: Él estará con nosotros. Lo que garantiza el éxito no es nuestra competencia, sino su presencia.

Oración:

Señor, gracias porque tu presencia es suficiente para sostenerme en cada desafío. Aunque me sienta incapaz o inseguro, ayúdame a recordar que no dependo de mis fuerzas, sino de tu poder. Enséñame a caminar en obediencia, confiando en que tú cumplirás lo que has prometido. Que mi vida sea un testimonio de tu fidelidad y de tu gloria, y que en todo lo que haga pueda reflejar que tú estás conmigo. En el nombre de Jesús, Amén.