Autor: admin

Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.

Acuérdate, oh Jehová, de tus piedades y de tus misericordias, Que son perpetuas. (Salmos 25:6)

Señor, bríndame la fortaleza, disciplina y convicción para vencer las debilidades que pudieran alejarme de Tus grandiosos caminos.

Hoy no es simplemente un día más, sino una nueva esperanza, una nueva ilusión y un motivo para dar gracias a Dios por la vida.

Amado Dios, por favor mantennos siempre a salvo de todos los peligros, cúbrenos con tu bendito manto y abre puertas y caminos para todos aquellos que necesitan de Ti: para los enfermos, para los que sufren y para los que buscan un trabajo. Permite que tu luz y tu amor se irradie por el mundo y que entre todas las personas reinen el afecto, la dicha, la salud y la tranquilidad.