Publicado por Deuteronomio 15 – El año de remisión, la generosidad y el corazón que refleja a Dios
Deuteronomio 15 revela el corazón compasivo de Dios hacia los necesitados. Este capítulo establece el año de remisión, la liberación de deudas y de siervos hebreos, y exhorta a una generosidad sincera. Dios muestra que la obediencia no solo se expresa en rituales, sino en justicia, misericordia y un corazón dispuesto a dar. La comunidad del pacto debía reflejar el carácter del Dios que libera.
Contenido
1. Dios ordena descanso y liberación periódica
La remisión evita que la pobreza se perpetúe y recuerda que Dios es el verdadero dueño de todo.
2. La generosidad no debe depender de conveniencia
El corazón obediente da aun cuando no obtiene beneficio inmediato.
3. Dios promete bendición a un pueblo generoso
La provisión divina acompaña a quienes confían y obedecen.
4. La pobreza se enfrenta con responsabilidad comunitaria
El pacto llama a cuidar activamente del hermano necesitado.
5. La libertad y el servicio nacen del amor, no de la obligación
Dios desea relaciones restauradas, no solo leyes cumplidas.
1. El año de remisión de las deudas (Deuteronomio 15:1-6)
- Cada siete años debía hacerse remisión de las deudas (v.1).
● El acreedor debía perdonar lo que su hermano le debía (v.2).
● Esta remisión aplicaba entre israelitas, no con extranjeros (v.3).
● Dios promete que no habría pobres si obedecían fielmente (v.4-5).
● Jehová bendeciría al pueblo y lo pondría por cabeza, no por cola (v.6).
● La obediencia económica refleja confianza en Dios.
2. Generosidad hacia el hermano pobre (Deuteronomio 15:7-11)
- Si hay un hermano pobre, no deben endurecer el corazón (v.7).
● Dios manda abrir la mano con liberalidad (v.8).
● Se prohíbe pensar egoístamente cuando se acerca el año de remisión (v.9).
● Dar con alegría trae bendición en toda obra (v.10).
● Siempre habrá necesitados, por lo que la generosidad debe ser constante (v.11).
● La misericordia es una respuesta continua, no ocasional.
3. Liberación de los siervos hebreos (Deuteronomio 15:12-15)
- Un hebreo vendido como siervo debía ser liberado al séptimo año (v.12).
● No debía salir con las manos vacías (v.13).
● El amo debía proveer generosamente de su propio bienestar (v.14).
● Israel debía recordar que fue esclavo en Egipto y Dios lo redimió (v.15).
● La liberación refleja el carácter redentor de Dios.
4. El siervo que decide quedarse por amor (Deuteronomio 15:16-18)
- Si el siervo amaba a su amo, podía decidir quedarse voluntariamente (v.16).
● El rito de perforar la oreja simbolizaba servicio por amor (v.17).
● Dios manda no considerar duro este mandato (v.18).
● El servicio que nace del amor honra a Dios.
5. Consagración de los primogénitos del ganado (Deuteronomio 15:19-23)
- Todo primogénito macho debía ser consagrado a Jehová (v.19).
● No debía usarse para trabajo común (v.19).
● Los primogénitos sanos se comían delante de Jehová (v.20).
● Los animales defectuosos no se ofrecían, pero podían comerse en casa (v.21-22).
● Se repite la prohibición de consumir sangre (v.23).
● Dar lo primero y lo mejor honra a Dios.
Versículo clave de Deuteronomio 15:
Para que Jehová tu Dios te bendiga en todo cuanto hagas y en todo lo que pusieres mano. Deuteronomio 15:10
Deuteronomio 15 revela con claridad el corazón compasivo de Dios. En este capítulo, el Señor establece el año de remisión, un tiempo donde las deudas eran perdonadas y los esclavos hebreos recuperaban su libertad. No era solo una norma económica, sino una enseñanza espiritual profunda: el pueblo que fue liberado de Egipto debía vivir reflejando esa misma misericordia.
Dios sabía que la pobreza y la necesidad existirían, pero también deja claro que no debían endurecer el corazón frente a ellas. El llamado no es a dar por obligación, sino con generosidad y disposición interior. La bendición no se mide solo en lo que se recibe, sino en la libertad de un corazón que sabe compartir sin temor.
Este capítulo confronta una actitud muy humana: el cálculo egoísta. Dios advierte contra la tentación de retener ayuda cuando el año de remisión está cerca, pensando más en la pérdida personal que en la necesidad del otro. Para Dios, la obediencia nace de la confianza. El que da con generosidad confía en que Dios es quien provee y sostiene.
La liberación de los esclavos también tiene un mensaje poderoso. Nadie debía ser despedido con las manos vacías. Dios quiere que la libertad vaya acompañada de dignidad, provisión y restauración. Él no libera para abandonar, sino para levantar.
Deuteronomio 15 nos recuerda que la fe verdadera se expresa en misericordia práctica. Un corazón transformado por Dios no se cierra, no se endurece y no se vuelve indiferente. La generosidad, el perdón y la compasión son reflejo de haber comprendido cuánto nos ha dado Él primero.
Oración:
Señor, forma en mí un corazón generoso y compasivo. Líbrame del egoísmo y del temor a perder cuando ayudo a otros. Ayúdame a confiar en tu provisión y a reflejar tu misericordia en mis acciones. Que mi vida sea un instrumento de libertad, dignidad y bendición para quienes me rodean. En el nombre de Jesús, Amén.
