Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. Josué 1:9
¿Qué tienen en común los siguientes hombres? Josué, el líder israelita; Daniel, el visionario; los discípulos de Jesús; y el apóstol Pablo. Todos ellos fueron fieles seguidores de Dios, pero además compartieron una necesidad esencial: todos necesitaron gran valor.
Josué fue llamado por Dios para guiar al pueblo de Israel hacia la Tierra Prometida. Es posible que haya pensado: “¿Quién soy yo para seguir los pasos de Moisés? ¿Y si el pueblo no me acepta como líder?” Pero Dios le habló con ternura tres veces, animándolo: “Esfuérzate y sé valiente.”
Josué respondió con fe y basó su valentía en dos preciosas promesas:
- Dios viaja con nosotros. El Señor prometió estar con los israelitas en la nueva tierra, y hace la misma promesa a nosotros hoy. De hecho, Su presencia es aún más íntima, porque habita en nosotros por medio de Su Espíritu Santo (Juan 14:16–17).
- Dios va delante de nosotros. El Señor prometió preparar el camino y encargarse del enemigo antes de que Israel llegara. Aunque aún enfrentaron batallas, Él les aseguró la victoria si obedecían. Del mismo modo, Jesús ya ganó la batalla espiritual en la cruz. Nuestra redención está asegurada, y nuestro lugar en la familia de Dios, establecido.
Así que, cuando enfrentes desafíos, recuerda que el Señor no solo camina contigo, sino que también va delante de ti.
Pídele a Dios que te ayude a confiar plenamente en estas dos promesas y a enfrentar cada día con valentía.
Reflexión:
Dios nunca nos llama a una tarea sin proveernos Su presencia y Su poder. ¿En qué área necesitas hoy recordar que Él está contigo y va delante de ti?
Señor, gracias porque Tu presencia me acompaña y Tu poder abre camino delante de mí. Ayúdame a vivir con fe y valentía, confiando en que nunca me dejarás ni me desampararás. En El Nombre de Jesús, Amén.