Éxodo 16 – El maná y las codornices
Éxodo 16 enseña que la vida del pueblo de Dios depende de su provisión diaria y de la obediencia a Su palabra:
- El maná simboliza que Dios suple cada día lo necesario, no antes ni después, recordando nuestra dependencia continua de Él.
- La enseñanza sobre el sábado subraya que la provisión divina incluye descanso y confianza, no solo trabajo.
- El maná anticipa a Cristo, el verdadero pan del cielo (Juan 6:32-35), quien sacia no solo el cuerpo, sino el alma.
Contenido
1. Murmuración del pueblo por falta de comida (Éxodo 16:1-3)
- Israel parte de Elim y llega al desierto de Sin, entre Elim y Sinaí, un mes después de salir de Egipto (v.1).
- Toda la congregación murmura contra Moisés y Aarón:
“Ojalá hubiéramos muerto en Egipto… cuando comíamos pan hasta saciarnos; nos habéis sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud” (v.2-3).
2. Dios promete pan del cielo (Éxodo 16:4-12)
- Jehová responde que hará llover pan del cielo para probar si el pueblo anda en su ley (v.4).
- Deben recoger la ración diaria, y en el sexto día el doble, para guardar el sábado (v.5).
- Moisés anuncia que por la tarde Jehová les dará carne, y por la mañana pan en abundancia, para que sepan que Él los sacó de Egipto (v.6-8).
- Aarón reúne al pueblo, y la gloria de Jehová aparece en la nube (v.9-10).
- Dios confirma que les dará carne al atardecer y pan en la mañana (v.11-12).
3. Provisión de codornices y maná (Éxodo 16:13-21)
- Por la tarde, codornices cubren el campamento (v.13).
- Por la mañana, aparece algo fino como escarcha sobre la faz del desierto: el maná (v.14-15).
- Su sabor era como hojuelas con miel (v.31).
- Cada uno debía recoger un gomer por persona, y ninguno debía guardar para el día siguiente (v.16-19).
- Algunos desobedecen y el maná guardado cría gusanos y hiede (v.20).
- Cada mañana recogían, y al salir el sol, el maná se derretía (v.21).
4. Preparación para el sábado (Éxodo 16:22-30)
- En el sexto día recogían doble porción; cuando Moisés lo explicó, no se halló gusano ni hedor en lo guardado para el sábado (v.22-24).
- Moisés enseña:
“Hoy es día de reposo en Jehová; no hallaréis maná en el campo” (v.25-26).
- Algunos salen a buscar el séptimo día y no encuentran, mostrando su desobediencia (v.27).
- Jehová reprende, pero establece el sábado como día de descanso (v.28-30).
5. El testimonio del maná (Éxodo 16:31-36)
- La casa de Israel lo llama maná, que significa “¿Qué es esto?” (v.31).
- Moisés ordena guardar un gomer de maná como testimonio para las generaciones futuras (v.32-34).
- Israel comió maná durante 40 años, hasta entrar en la tierra prometida (v.35).
Versículo clave de Éxodo 16:
Y Jehová dijo a Moisés: He aquí yo os haré llover pan del cielo; y el pueblo saldrá, y recogerá diariamente la porción de un día, para que yo lo pruebe si anda en mi ley, o no. Éxodo 16:4
En el desierto, el pueblo comenzó a murmurar por hambre, recordando con nostalgia la comida de Egipto. Pero Dios, en su misericordia, les dio maná, un pan del cielo que debían recoger cada día. La provisión no solo satisfacía su necesidad, también era una prueba de obediencia y confianza: debían recoger solo lo necesario para cada jornada y depender diariamente del Señor.
Este versículo nos enseña que la verdadera fe se vive día a día. Dios no les dio reservas para meses, sino la porción justa para cada jornada, para que aprendieran a depender constantemente de Él. Así también en nuestra vida, Dios nos invita a confiar en que cada día traerá la provisión y la gracia necesaria.
El maná apunta proféticamente a Jesucristo, el Pan de Vida, quien vino del cielo para saciar nuestra hambre espiritual. Él nos recuerda que no vivimos solo de pan, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
Oración:
Señor, gracias porque eres fiel en proveer lo que necesito cada día. Ayúdame a no vivir en ansiedad por el mañana, sino a confiar en tu provisión diaria. Enséñame a obedecerte en lo pequeño y a depender siempre de tu gracia. Que mi corazón encuentre en Cristo, el Pan de Vida, la verdadera satisfacción y fortaleza para caminar contigo. En el nombre de Jesús, Amén.