28 de Marzo: Nuestra fuente de alegría

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(Lee al final el estudio contextual del versículo de hoy) – * Ha sido agregado estudio de referencias cruzadas por palabras y términos de versículo al final del Devocional. Esperamos sea de bendición para ti.

Palabra:

Pueblos todos, batid las manos; Aclamad a Dios con voz de júbilo. Porque Jehová el Altísimo es temible; Rey grande sobre toda la tierra. El someterá a los pueblos debajo de nosotros, Y a las naciones debajo de nuestros pies. El nos elegirá nuestras heredades; La hermosura de Jacob, al cual amó. Selah (Salmos 47:1-4)

Pudiera parecer que el versículo de hoy es fácil de interpretar. Es un canto entusiasta para celebrar con júbilo todo lo que el Señor ha hecho y los maravillosos dones que de Él podemos heredar. Pero el hecho de que podamos interpretarlo con facilidad no supone que sea igual de sencillo de practicar.

Reflexiona un momento sobre esto: ¿Resulta fácil encontrar la alegría en un mundo tan convulsionado como el de hoy? ¿Cuándo fue la última vez que te sentiste regocijado? Probablemente te hayas alegrado de una buena noticia, pero ¿alguna vez te has sentido regocijado a propósito, siendo consciente de ello? ¿Podríamos ser capaces de hacer eso?

La escritura del día de hoy nos da una pista. Nos habla sobre la alegría que es resultado de las grandes cosas de Dios y su propósito en el corazón de los hombres y nos invita a inspirar nuestro regocijo llamándonos a recordar y ponderar, que todo lo que nos ha sido dado, es producto del obrar del Señor en nosotros.

¿Cómo imaginas que sería el mundo si pudiéramos asumir mantener nuestra alegría como una práctica de todos los días? Empecemos hoy haciendo una pequeña lista de las cosas que Dios nos ha concedido. Mantenla contigo y ojéala durante la semana, cuenta todas tus bendiciones y déjate sumir en la alegría de saber que el Señor ha derramado sobre ti su grandiosa misericordia.

Recuerda que a pesar de que la vida no sea buena siempre, puedes contar con la alegría de saber que Dios siempre lo será: «Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: !!Regocijaos!» (Filipenses 4:4)

Oración:

Señor te celebro porque eres mi primer motivo de regocijo. Condúceme siempre a recordar todo lo que por mi has hecho, para fortalecer mi alegría, de forma que pueda recibir de ti, el don de la gratitud. Amen.

Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen de Capitulo Salmos 47:

El Salmo 47, es un himno de alabanza y celebración de la soberanía universal de Dios sobre todas las naciones. Este cántico invita a los pueblos a reconocer la majestad y el poder de Dios, subrayando su reinado absoluto sobre la tierra. La exhortación a aplaudir y a cantar con júbilo pone de manifiesto la alegría y el respeto que deben ser mostrados y guardados al Señor, como el Rey supremo.

Desde el inicio, el salmista llama a todas las naciones a unirse en la alabanza a Dios, destacando su victoria sobre los enemigos y su elevación como autoridad suprema. La imagen de Dios ascendiendo entre aclamaciones y con sonidos de trompetas simboliza su triunfo y majestad sobre todo lo creado en un contexto de exaltación y adoración.

El Salmo 47 también enfatiza la elección de Dios de su pueblo, señalando su amor especial hacia Israel, a quien le ha dado una herencia. Sin embargo, la invitación a la alabanza no se limita solo a Israel, sino que se extiende a «todos los pueblos», reconociendo a Dios como el soberano de toda la tierra.

Este salmo culmina en una declaración de fe en el gobierno justo y sabio del Señor todopoderoso sobre las naciones, presentándolo no solo como un rey infinitamente soberano y supremo, sino también como guía y protector de su pueblo. En resumen, el Salmo 47 es un llamado vibrante a la adoración colectiva, reconociendo a Dios como el rey supremo y señor de toda la creación, cuyo reinado trasciende fronteras y une a la humanidad en la alabanza continua y la adoración fiel y comprometida.

Referencias cruzadas Salmos 47:1-4:

El Salmo 47 como un Salmo de adoración, es una invitación a la alabanza universal de Dios, reconociendo su soberanía y majestad. A continuación citamos, cinco referencias cruzadas que amplían la misma visión de alabanza del Salmo 47 en otros pasajes de las Santas Escrituras:

1. Salmos 95:1-3: «Venid, aclamemos alegremente a Jehová; Cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia con alabanza; Aclamémosle con cánticos. Porque Jehová es Dios grande, Y Rey grande sobre todos los dioses.» Este salmo comparte la llamada a la alabanza y adoración de Dios, destacando su grandeza y supremacía sobre todo lo existente.

2. Salmos 96:4-5: «Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Temible sobre todos los dioses. Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos; Pero Jehová hizo los cielos.» Este pasaje también invita a reconocer la grandeza de Dios sobre todo lo que el ser humano en su imperfección, implique en designar como deidad, reafirmando la idea de que es sólo uno, el Dios todopoderoso de soberanía y supremacía creadora.

3. Salmos 99:1-3: «Jehová reina; temblen los pueblos. Él está sentado sobre querubines; muévase la tierra. Jehová es grande en Sion, Y exaltado sobre todos los pueblos. Alaben tu nombre grande y temible; Santo es.» Este salmo resalta el reinado de Dios y su santidad, invitando a los pueblos a reverenciarlo y alabar su nombre.

4. Apocalipsis 19:5-6: «Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes. Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina.» Este pasaje del Nuevo Testamento celebra el reinado de Dios con una invitación universal a la alabanza, que contrasta ampliamente y de forma similiar con el llamado a la adoración realizado en El Salmo 47.

5. 1 Crónicas 16:25-26: «Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Y temible sobre todos los dioses. Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos; Pero Jehová hizo los cielos.» Este canto de David, parte de la celebración del arca traída a Jerusalén, también declara la supremacía de Dios sobre los ídolos y la dignidad del que debe ser receptor en constante alabanza.

Estas referencias cruzadas ilustran la importancia de la alabanza y la adoración a Dios como el Rey supremo y creador de todo, un tema recurrente en las Escrituras que subraya la majestad y soberanía de Dios sobre toda la tierra y sobre todos los pueblos.