Señor, soy débil, pero tú eres omnipotente. Dame valor para ayudar a otros con tu fortaleza infalible y confiar siempre que contaré con tu presencia para librarme, sin importar la circunstancia.
Seguir leyendoLos detalles de Miguel Ángel
Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? (Mateo 6:30)
Seguir leyendoOración de la mañana 23 de Septiembre
Señor, quiero estar lo suficientemente cerca de ti para conocer y cumplir el propósito que me has dado y en tu presencia experimentar la libertad de vida de la manera que Tú has deseado que fuera.
Seguir leyendoComentario Diario #378: Salmos 100:1
Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. (Salmos 100:1)
Seguir leyendoGuerrero de Dios #578: Dios en batalla
Señor, soy débil, pero tú eres omnipotente. Dame valor para ayudar a otros con tu fortaleza infalible y confiar siempre que contaré con tu presencia para librarme, sin importar la circunstancia.
Seguir leyendoBuenos Días #578
Hoy no es simplemente un día más, sino una nueva esperanza, una nueva ilusión y un motivo para dar gracias a Dios por la vida.
Seguir leyendoTodo Bajo Su Control
¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti. (Isaías 49:14-15)
Seguir leyendo22 de Septiembre: Intenciones puras
Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones. (1 Tesalonicenses 2:4)
Seguir leyendoPoderosas herramientas
Señor, Gracias por dar la oración y la Biblia como herramientas para una vida devocional plena en ti. En ellas me afianzaré para seguir de Tu mano caminando por las sendas de la voluntad que tienes para mi.
Seguir leyendoLa espada de Damocles
No es buena vuestra jactancia. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa? Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. (1 Corintios 5:6-7)
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