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Apocalipsis 15 – El Cielo y la Preparación para los Juicios Finales
Apocalipsis 15 nos presenta una visión celestial del juicio final y la victoria de los justos sobre la bestia.
- Los vencedores son aquellos que perseveraron en la fe y rechazaron la marca de la bestia, demostrando que la fidelidad a Dios es recompensada.
- El cántico de Moisés y el Cordero expresa la grandeza de Dios y su justicia en los juicios que está por ejecutar, recordando a los creyentes que Dios es soberano y su justicia es perfecta y verdadera.
- La apertura del templo y la santidad de Dios muestran que los juicios de Dios son inevitables y deben cumplirse con el máximo respeto y reverencia.
Este capítulo nos llama a mantener nuestra fe en tiempos de persecución, sabiendo que la victoria final es de los justos y que Dios es justo en todos sus caminos, incluso cuando los juicios parecen severos.
- Visión de los Vencedores sobre la Bestia (Apocalipsis 15:1-4)
Juan ve en el cielo otra gran señal, una gran maravilla que simboliza el fin de los juicios de Dios que están por venir.
- Siete ángeles tienen siete plagas, que son los últimos juicios de Dios, porque con ellos se consumará la ira de Dios (v.1).
- Los vencedores sobre la bestia, aquellos que no adoraron a la bestia ni recibieron su marca, se encuentran de pie junto al mar de vidrio, con arpas de Dios en sus manos (v.2).
- Estos vencedores cantan el cántico de Moisés y el cántico del Cordero, proclamando las grandezas y maravillas de Dios.
«Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos.» (v.3)
- Este cántico exalta a Dios como justo y fiel en sus juicios y como el único digno de adoración por su soberanía sobre la creación.
2. La Santidad de Dios y el Templo Abierto (Apocalipsis 15:5-8)
- El templo del tabernáculo del testimonio en el cielo se abre, y siete ángeles con las siete plagas salen del templo, vestidos de lino limpio y resplandeciente, con cinturones de oro (v.6).
- El templo se llena de humo por la gloria de Dios y su poder, y nadie puede entrar en el templo hasta que se hayan consumado los juicios de los siete ángeles (v.8).
Esto refleja la santidad de Dios, quien es tan majestuoso y glorioso que su presencia es imposible de aproximar mientras se llevan a cabo estos juicios.
Versículo clave de Apocalipsis 15:
Y vi en el cielo otra señal grande y maravillosa: siete ángeles que tenían las siete plagas postreras, porque en ellas se ha consumado la ira de Dios. Apocalipsis 15:1
Este versículo describe una visión poderosa y solemne: los siete ángeles con las siete plagas finales, que representan el juicio final de Dios sobre el mal. Las «plagas postreras» son la culminación de la ira de Dios contra la corrupción, el pecado y la rebelión en el mundo. Este pasaje nos muestra que, aunque Dios es paciente y misericordioso, su justicia también es inevitable y perfecta. Las plagas simbolizan la consecuencia final del rechazo a Dios.
El versículo nos recuerda que el juicio de Dios es justo y necesario para restaurar el orden y la paz en su creación. Sin embargo, esta visión también nos invita a reflexionar sobre la urgencia de vivir según su voluntad, pues este juicio no es una amenaza vacía, sino una realidad futura que, para los creyentes, debe ser vista con una mezcla de reverencia y esperanza.
Oración:
Señor, gracias por tu justicia y tu paciencia. Ayúdame a vivir con la certeza de que Tú harás justicia en Tu tiempo perfecto. Gracias por salvarme de la ira venidera a través de Cristo. Enséñame a vivir con integridad, sabiendo que Tu juicio es inevitable y justo. En el nombre de Jesús, Amén.
